El Gran Paraíso es un restaurant ubicado en pleno barrio de La Boca, donde funcionaba un conventillo. Con rincones y detalles que recuerdan el paso de los primeros habitantes, los inmigrantes genoveses, el lugar ofrece una carta variada, típicamente argentina, en la que el asado es la gran estrella.
Almorzar al aire libre en el patio de lo que fue un conventillo de 1890 del barrio de La Boca. Esto es lo que propone el restaurant El Gran Paraíso, una experiencia que lleva a viajar en el tiempo, imaginando a los primitivos habitantes de esos cuartos armados con maderas y chapas, los inmigrantes genoveses.

«La mayoría de los materiales utilizados para construir los conventillos eran de origen europeo, ya que venían en los barcos. Primero se establecieron los marineros y luego familia», explican los responsables de El Gran Paraíso, lugar que todavía conserva restos de la casa genovesa de la planta alta, que se puede visitar. En el patio de piedra, en tanto, donde ahora se ubican las mesas, antes se levantaba una casa de dos plantas.

Con detalles que se conservan para mantener el espíritu de nuestros inmigrantes, en el lugar se pueden ver el típico piletón para lavar la ropa, antiguos chapones fileteados con inscripciones y el toque verde de las plantas, que no podían faltar.

¿Qué ofrece el menú de El Gran Paraíso? El primer atractivo es la carne argentina, famosa en todo el mundo, que se grilla al carbón y a la leña, lo que le confiere un sabor característico y único del típico “asado argentino”. De igual manera hay platos vegetarianos, ensaladas, verduras grilladas, provoletas y empanadas. Exquisitos postres como chocotorta, Tiramisú, flan, manzanas al Malbec, entre otros. Acompañan vinos de grandes bodegas nacionales.

La idea es que quienes disfruten de una comida en El Gran Paraíso vivan la experiencia de almorzar en un conventillo histórico, en pleno Caminito. Familias y turistas podrán, así, sumergirse en la historia de nuestro país allá por finales de 1800, cuando los inmigrantes llegaban de a miles para trabajar, armar sus familias y sentar las bases de nuestro presente.

Se comenta que a estas construcciones se los llama conventillos por dos posibles interpretaciones. Por un lado, por su arquitectura y distribución, que asemejan a un convento (espacios privados y otros en común, compartidos) y, por el otro, también se relacionaba a la forma de vida en los conventos, es decir, a la fraternidad que existía entre sus habitantes, que, en tiempos de inmigrantes, hacia que cada vez que un nuevo genovés llegaba a instalarse, lo recibían e hicieran sentir como en su familia.

Al recorrer El Gran Paraíso, se puede observar que la casa se mantiene bastante original en cuanto a materiales y distribución. Data del 1900, cuando se construyeron las primeras en el barrio de La Boca. Algunas fotos tomadas entre los años 1947 a 1950 son prueba de ello y se pueden observar en la planta alta y en el salón.

Estas construcciones de madera y chapa, eran muy dinámicas en cuanto a que con el crecimiento del numero de integrantes de cada familia, se ampliaban o adaptaban para mayor comodidad. Las que se mantienen originales son fácilmente identificables, ya que sus formas son muy simétricas, de volúmenes similares, a diferencia de las modificadas, en las que se nota el uso de otros materiales y formas irregulares.
El Gran Paraíso está en Garibaldi 1428, Buenos Aires, Argentina.
Tel: (54 11) 4302 1752
Email: info@granparaiso.com.ar
Horario: Lunes a domingos al mediodía, por la noche se abre solo para eventos.
Email: info@granparaiso.com.ar
Horario: Lunes a domingos al mediodía, por la noche se abre solo para eventos.